Hace ya unos cuantos años -más de 20, seguro- llegó a mi poder un breve, indatado y anónimo documento sobre mi querido pueblo, titulado "Herreros: datos para su estudio", que más abajo transcribo íntegramente. Su autor, probablemente a instancias del obispado de Osma-soria, el mismo que en persona lo llevara a mi domicilio paterno: se trata de Eustaquio de la Torre Romero (primo, no sé bien en qué grado, por parte de padre) del que, me atrevo a aseverarlo, guardarán un gran recuerdo todos aquellos que lo conocieron como "EL CURA DE LA CUENCA" y "EL CURA DE EL ROYO" (que yo sepa) porque ha sido, es y será una extraordinaria persona. Mi padre, que en paz descanse, siempre decía de él que era uno de los pocos curas buenos que conocía. Quizá fuera por esa pasión que siempre tuvo por su familia de Abejar, porque había tratado con pocos, y no muy ejemplares (que de todo hay en la viña del Señor) o por su nula simpatía por la Iglesia.
Bueno, ya está bien; dejemos a la Iglesia en paz con Dios. Me he decidido a poner en órbita esta insignificante partícula en el inmenso ciberespacio con la esperanza de que alguna "RATA DE BIBLIOTECA, DE SACRISTÍA..." (dicho sea en el óptimo sentido de la expresión) haga caso del título del documento y contribuya a hacerla crecer. Me hará un gran favor, no sólo como chaveto, sino también como nieto de uno de los personajes que en él se citan: Félix Andrés.
¡GRACIAS!
HERREROS: DATOS PARA SU ESTUDIO
ORIGEN DEL NOMBRE ACTUAL.- Al ser repoblado el Alto Duero por Alfonso I de Aragón en el primer tercio del siglo XII le fue impuesto el nombre de FERREROS, derivado del latín, en atención a que sus primeros colonos se dedicaban preferentemente a las artes del hierro. De FERREROS, por simple cambio fonético, viene el nombre actual de Herreros. (Véase Celtiberia, nº 51).
PREHISTORIA.- Es evocador el nombre de AMBLAU como integrante de la toponimia de Herreros. En su vega se han encontrado restos de la "Cultura del vaso campaniforme" (Referencias en Museo Numantino y en la obra "El vaso campaniforme en la meseta norte española" por Germán Delibes de Castro).
HISTORIA.- Herreros fue aldea de la Villa de Soria y su Tierra formando parte del SEXMO DE FRENTES hasta la fundación de los Municipios el año 1836. Según Actas de dicho Sexmo fue pueblo y en 1789 era cabecera de comarca denominada VALDEHERREROS y estaba constituida por los siguientes pueblos: HERREROS, Villaverde, Cidones, Ocenilla, Toledillo, Pedrajas y Oteruelos. Perteneció a la Real Cabaña de Carreteros, institución favorecida por privilegios reales y desaparecida a finales del siglo pasado con la llegada de los ferrocarriles. Hoy día sigue formando parte de la "Mancomunidad de los 150 pueblos de la Tierra de Soria". Su Arciprestazgo durante siglos fue Rabanera del Campo y en cuanto a diezmos fue tributario de la Parroquia de San Nicolás de Soria. (Véase Celtiberia nº 28 y Boletín del Obispado de Osma-Soria, Mayo 1980).
DEMOGRAFÍA.- FERREROS (Herreros) tenía solamente cinco vecinos el año 1270 y a distancia de siglos podemos saber por un documento del Archivo de Ntra. Sra. del Espino de Soria fechado el 22 de Agosto de 1352 hasta el nombre mismo del Cura de Herreros; se llamaba Blasco López. Ya en 1788, según el historiador diocesano Loperráez, contaba con 56 vecinos.
GREMIO DE ESCULTORES, PINTORES Y DORADORES.- Está representado por Bernardo Romera y Juan Verde. Obra de estos artistas fue la primorosa cajonería de la Iglesia Parroquial de Abejar tallada en nogal. Ya en pleno siglo XX, el día 15 de Octubre de 1925, se perdió con el fallecimiento de Félix Andrés, "Carpintero, escultor, dorador y charolista", según rótulo de su taller, el último eslabón de esta tradición artística (Véase Libros Carta Cuenta de Parroquias cercanas a Herreros, Abejar, El Royo, Santuario de Ntra. Sra. de Hinodejo etc.)
HIJOS ILUSTRES.- Hay que hacer mención honorífica de D. José Clemente Carnicero Torroba, nacido en Herreros el 18 de Noviembre de 1770, Sacerdote, Archivero de Indias en Sevilla y, según parece, consejero de Fernando VII. Legó a la posteridad varias obras, en su mayoría inéditas. Gran defensor de Soria y de su tierra escribió un libro polémico sobre la nueva demarcación provincial realizada el año 1833. En él su firma literaria fue Camilo Batanero y Tundidor. (Véase "Hijos ilustres de Soria y su Partido" por D. Anastasio González Gómez y "Guía literaria de Soria" por D. José Antonio Pérez Rioja).
RUTA LITERARIA.- Cabe recordar la Leyenda de los Siete Infantes de Lara donde se cita expresamente el valle de Febros (Río Hebrillos). También al novelista Pío Baroja que al regresar de Urbión, cansado y perdido por las hondonadas de Amblau, entró en el pueblo a la luz de la luna por la Ermita de la Soledad y disfrutó por una noche de la amable hospitalidad de los CHAVETOS. Este apodo, lejos de ser despectivo, constituye timbre de honor y como la Partida de Nacimiento de su pasado remoto. (Véase Obras Completas de Pío Baroja "A orillas del Duero" pág. 308).
ARTE.- Iglesia gótica dedicada a la Asunción, siglo XVI; Ermita de la Soledad, Ermita de San Roque y Ermita de San Andrés por donde nos es dado entrever la elevada religiosidad de Herreros durante los siglos XVII, XVIII y XIX.
TURISMO.- Herreros está situado a 24 kilómetros de Soria en un bello paraje ribereño del embalse de La Muedra o Cuerda del Pozo. Cuenta con estación de ferrocarril Santander-Mediterráneo y carretera de Sagunto-Burgos trazada entre la antigua vía romana Numancia-Clunia.
FUTURO.- Este pueblo contempla el porvenir con ilusión y esperanza fundada en el lugar privilegiado de veraneo con sus 1118 metros de altitud y la explotación de sus recursos naturales de agricultura y ganadería.
