Caranva Romero

Estaba de vacaciones en el pueblo. una mujer echaba puñados de trigo en el suelo de un cerrado gallinero.

Estaba interno en un tiflohomérico colegio. Un profesor dictaba las preguntas del examen el la clase.

Los pollos, picando sin pausa en el suelo, recogían su alimento para el cuerpo.

Los alumnos, picando con punzones en las pautas las preguntas y respuestas, activaban su aparato digestivo intelectual.

Hoy, En mi memoria, repiquetea el idéntico sonido del tupido picoteo de picos y punzones, preguntándome: Paco Peco Poco Pico, ¿qué fue de aquellos pollos y alumnos por entonces en pleno proceso de engorde corporal o intelectual?